Marxismo Leninismo y la crisis.

El sistema y la crisis económica, breve cuadro clínico del enfermo:

La coyuntura actual se explica en primer lugar por la acumulación de una masa de capital de valor incalculable. Esta acumulación de capital es llevada más allá de sus propios límites naturales creando una falsa sensación de seguridad y haciendo que la posibilidad de una nueva crisis sea casi inexistente. Debemos recordar que la crisis es una etapa necesaria en el ciclo económico capitalista. Cuanto mayor sea el tiempo en el que la burguesía consiga prolongar la acumulación de capital y mayor sea la cantidad de capital disponible, mayor serán las consecuencias catastróficas a nivel político y humano.

Entre las causas de la crisis del capital se encuentran:

-La mala organización de la producción: el capital invierte en medios de producción (maquinaria, nuevas infraestructuras…) y fuerza de trabajo para poder obtener una ganancia: la llamada plusvalía. Ésta procede de la explotación de la clase trabajadora en combinación con los medios de producción.
La finalidad del sistema capitalista es el aumento de la productividad consiguiéndolo a través de la introducción de innovaciones tecnológicas, esto da lugar a que muchos trabajadores se vean arrojados al paro (dado que su trabajo es realizado por nueva maquinaria).
Se produce una contradicción: el capital aumenta la productividad y al mismo tiempo expulsa a los únicos elementos que pueden generarle valor añadido: los trabajadores. La consecuencia es una bajada progresiva de la tasa de ganancia.

-La segunda causa de las dificultades que ha de afrontar el capital es la acumulación de mercancías, consecuencia de la sobreproducción de capital, de medios de producción y de bienes de consumo que abarrotan el mercado.
Resumiendo, tenemos por un lado que el capital invierte mucho más en maquinaria y tecnología que en asalariados y por otro, que la producción deja de prestar atención al consumo, provocando que dicha acumulación de mercancías no tenga salida alguna.

-Otro elemento que agudiza las contradicciones existentes en la economía capitalista es el crédito financiero. Este permite expandir las fuerzas productivas a través de créditos cuyo rembolso nadie puede asegurar después.
Es falso que la actual crisis capitalista sea una crisis meramente financiera, ya que aunque es cierto que la banca ha sido el detonante. Dicha crisis sólo se puede entender como consecuencia de una crisis productiva anterior.